18 May Bioarray y su nuevo nicho genético: el coronavirus también ‘reconvierte’ a las biotecnológicas
El coronavirus está provocando la reconversión de diversos sectores y abriendo nuevos nichos de mercado para algunas empresas como es el caso de la ilicitana Bioarray, que ha estado un mes pasando los trámites sanitarios pertinentes con la Conselleria de Sanitat para poder realizar test PCR y rápidos.
La compañía de biotecnología Bioarray, ha estado readaptando su laboratorio del Parque Científico de la UMH, para llevar a cabo unas labores que parece irán para largo.
Para poder realizar estas pruebas, la Conselleria tiene que examinar unos parámetros de habilitación como laboratorio clínico. Es por ello que Andrés Antón ha estado trabajando durante el pasado mes para que el de Bioarray estuviera a punto. Actualmente, ya han pasado la inspección de Sanidad, que también tiene que comprobar los estándares del laboratorio: que tenga un nivel de bioseguridad 2, que es el que se exige a los que trabajan con virus. Además, también han montado un módulo separado de la sala de muestras y otro para la sala de espera de los pacientes, ya que “podemos encontrarnos con asintomáticos”, tal y como explica Antón. Ahora mismo tienen una capacidad para una producción de 2.000 muestras semanales: 400 de PCR al día y 150 test rápidos.
En cuanto al personal, cuentan con mono, gafas y guantes. Además, recientemente habían adquirido un robot Opentrons para hacer librerías de secuenciación masiva para poner en marcha el laboratorio de Microbiología, “pero nos dimos cuenta que era buena herramienta para purificación”. Con él pueden procesar y extraer las pruebas automáticamente, evitando que el operador toque la muestra, que “se manipula lo menos posible” y que además evita posibles errores humanos y “aumenta la rapidez”, añade Antón. Esta máquina permite multiplexar, es decir, hacer de un golpe varias muestras, y trabajar a la vez con 96 muestras.
Por tanto, aunque ha bajado el trabajo, lo han reenfocado en otra vertiente genética, más allá de la propia. Aunque la plantilla es de 25 personas, también se han acogido a un ERTE por la bajada de la producción, y mantienen a cuatro personas en el laboratorio, otra parte teletrabajando, y el resto en el expediente. Tal y como explica Antón, tienen un segmento de trabajo “muy potente”, que es el de la reproducción asistida. A propósito de este tema cabe destacar que 48 horas antes de que una mujer entre al quirófano hay que hacerle un test PCR para garantizar que todo está bien. Pero no solo a las embarazadas, sino también a los donantes, por lo que Bioarray tiene un nuevo nicho de trabajo además del servicio diagnóstico y las pruebas que a partir de ahora realizarán en empresas y a trabajadores.
Ahora, además de haber habilitado la parte de Microbiología en el laboratorio para empezar a trabajar en algunas enfermedades como el Virus del Papiloma Humano (HPV), abren otro mercado con la parte genética, que se une al del diagnóstico genético prenatal y psotnatal, así como el preimplantacional que ya venían trabajando.
Hace unos días, junto a la Asociación de empresas de Biotecnología de Alicante (Aeba), que también preside Andrés Antón, volvieron a poner la capacidad de los laboratorios privados a disposición de la Conselleria con el no cambio de fase. Ahora, al rebajar las condiciones y hacer los test a pacientes más leves, es necesario incrementar la capacidad de los mismos.
La Fundación de empresarios valencianos en Madrid, Conexus, recomienda esta noticia de Alicante Plaza.