‘Aura’, el último trabajo del alicantino Yvan Andreu donde se unen moda y tecnología

16 Mar ‘Aura’, el último trabajo del alicantino Yvan Andreu donde se unen moda y tecnología

El diseñador alicantino Yvan Andreu muestra su última colección, Aura, donde la aplicación de la tecnología a la moda ha sido la base y ha conquistado al jurado del XIII Samsung EGO Innovation Project durante la 71ª edición de Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid, celebrada en enero.

Se trata de un sistema tecnológico aplicable a diversas piezas textiles y que funciona a través de gafas o mascarillas, con cámaras de visión térmica que detectan la temperatura corporal del interlocutor, aplicando despeñes cambios en el color de la ropa a través de sensores.

Tal y como explica su creador, este dispositivo “mide la energía que proyecta una persona; su auténtica aura”. lo hace mediante parámetros como la temperatura corporal, un elemento que sirve para canalizar pensamientos, estados de ánimo y sentimientos. Por ejemplo, “si una persona ha recibido una mala noticia, su reacción suele ir unida a un descenso drástico de la temperatura corporal mientras que, si recibe una alegría, el estado de éxtasis o el subidón de adrenalina suele ir asociado al aumento de los grados”, explica Andreu. La cámara que percibe esos cambios en los valores, se encarga de emitir una señal a unos sensores de luz led que se colocan en distintas partes de la pieza, que a su vez emiten diferentes colores, en función de lo que esté viendo la persona. “Si detecta calor, emitirá colores cálidos en gamas de amarillos, naranjas y rojos…mientras que si nota frío emitirá colores azules”, describe.

Se trata de una tecnología que bien podría predecir por tanto, si el interlocutor de esa persona tiene fiebre, uno de los principales síntomas del estado avanzado de la enfermedad que provoca el coronavirus. Sin embargo, no era la intención inicial del diseñador obviamente. De hecho, las mascarillas que utiliza el diseñador alicantino en Aura, no están diseñadas con ningún objetivo sanitario y por tanto no son útiles para combatir el COVID-19, si bien Andreu no descarta modificarlas para tal fin si el público lo solicita. “El objetivo era medir lo intangible convirtiéndolo en algo físico”, explica el creador.

“Aura está avanzado hasta un punto, pero para matizar todo esto mucho más necesitamos una visión de campo y una medición más amplia de a persona a la que se está analizando”, explica. El objetivo es seguir avanzando en el campo de la tecnología y lo sensitivo, por lo que pronto llevará a cabo un programa de investigación y desarrollo al respecto, a través del cual irán integrando más avances en torno al concepto ‘wearable technology’ en sus próximas colecciones. “Nos hemos propuesto lidiar con el estrés diario y estamos desarrollando una aplicación sensitiva que irá unida a tejidos también mucho más sensitivos que ayudarán a transmitir todo eso y actuar en consecuencia”, manifiesta Andreu.

La colección Aura está formada por cinco piezas diferentes aplicables a cinco tipos de prendas como pueden ser los vestidos y los complementos. Pero este innovador sistema se ha aplicado a un conjunto de piezas independientes, la colección l’Atome sauvage, pensada para el otoño-invierno 2020-21. “La pureza del átomo es la inspiración de esta colección que se compone de prendas muy limpias y minimalistas”, explica su autor, que a pesar de todo lo tecnológico quiere apuntar también a la ventaja de la discreción, por lo que añade que las piezas “son ponibles, pensadas para sacar a la calle”. De esta forma, con aires futuristas crea su “universo paralelo”, como una abstracción del mundo en el que vivimos. Un lugar en el que dar rienda suelta a los pensamientos y las sensaciones, “a nuestro verdadero yo”.

Además, Yvan Andreu se introduce en el mundo de los materiales ecológicos, muy consciente del mensaje que debe lanzar ahora la industria textil. “Queremos que los materiales también sean puros, así que en su mayoría utilizamos sedas o algodones naturales”, afirma. En el caso de los plásticos que inevitablemente tienen que incluir por exigencias del diseño, como es el caso del charol, proviene de plásticos reciclados y que se pueden volver a reciclar. “El objetivo es que lo que provenga de la tierra se le pueda devolver a ella sin perjuicio”. Se trata sin duda de un cambio de rumbo en lo que comenzó siendo su sello de identidad, pues Andreu se inició en el mundo de la moda con vinilos y neoprenos. “El mundo que nos rodea está cambiando y la moda tiene un gran impacto en todo ello, así que la moda tiene que adaptarse también para que todo mejore y tengamos un planeta mejor”, manifiesta el diseñador. “Antes no tenía un concepto tan desarrollado como lo tengo ahora y, al principio, parece que buscas hacer cosas más locas dándote igual el medio que utilizas, porque lo que buscas es el impacto final, pero ahora soy más consciente de todo”, añade.

Dada la actual crisis sanitaria que estamos viviendo como consecuencia del coronavirus, los desfiles del diseñador alicantino están en el aire, por lo que comenzará a aumentar el contenido audiovisual de los canales de la firma, como son su página web y sus redes sociales, donde irán presentando esta colección que ya pudo verse el pasado enero en la MBFW de Madrid. Más adelante pondrán en marcha otros proyectos audiovisuales como la producción de un fashion film.