05 Ago Turisme prevé una ocupación hotelera del 77% para la costa de Castellón durante el mes de agosto
Los hoteles de la provincia de Castellón alcanzarán una ocupación del 77% en la costa y el 63% en interior, según las previsiones de Turisme Comunitat Valenciana.
Si observamos los datos del conjunto de la Comunitat, vemos que las previsiones apuntan a una ocupación en el litoral del 82% y en el interior del 70%, lo que demuestra “la solidez del sector y su competitividad”.
Por zonas, Benidorm es la que espera una ocupación hotelera más alta, con una media del 90%, diez puntos por encima del resto de la costa alicantina. El litoral de Castellón por su parte, rozará el 77% t el de Valencia superará el 73% según la encuesta de Turisme.
En el interior, la ocupación media será cercana al 70%, impulsada sobre todo por los establecimientos de la provincia de Valencia, que han aumentado las reservas en un 1,4% hasta conseguir el 82% de ocupación. En Castellón superarán el 63% y en el interior de Alicante podrían llegar al 34%, según los datos previsivos.
En cuanto a otro tipo de alojamientos, cabe destacar los campings, cuya ocupación oscilará entre el 95% para los bungalows, el 83% para las parcelas y el 84% para los apartamentos turísticos.
En cuanto al pasado mes de julio, los datos reflejan una ocupación media del 86%, con una ligera subida del 0,4% en zonas costeras y un 66% en zonas de interior, si lo comparamos con el mismo mes del año anterior.
En general, las previsiones para el litoral son similares a las del año pasado, aunque las cifras pueden variar debido a las reservas de última hora porque tal y como nos explica el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, “los turistas retrasan su decisión de viajar cada vez más”.
No obstante, las previsiones demuestran “la potencia del sector turístico valenciano y la consolidación del crecimiento alcanzado gracias al esfuerzo, la innovación y la competitividad de empresas y trabajadores”, añade Colomer. En este contexto, Turisme CV considera que el reto “no es tanto alcanzar altas cifras de ocupación durante julio y agosto, sino la desestacionalización, la creación de nueva oferta turística todo el año, más allá del sol y playa, y la mejora de la rentabilidad”, concluye.